Todo lo que tienes que saber sobre las hidroeléctricas
El agua es el compuesto más importante para la vida en la Tierra, se mueve constantemente a través de un ciclo global conocido como ciclo hidrológico: el sol calienta los cuerpos de agua como ríos, lagos, océanos, etc. provocando que el agua se evapore, a medida que el agua fluye en la atmósfera, se condensa para formar nubes que eventualmente liberan agua en forma de lluvia, nieve o granizo. El agua cae, escurre, se infiltra al subsuelo, se absorbe por la vegetación, cae en ríos, lagos y océanos, para posteriormente regresar a la atmósfera y completar el ciclo.
La energía que se origina naturalmente por el movimiento del agua puede ser aprovechada para producir energía eléctrica o mecánica en las plantas hidroeléctricas. Este tipo de energía se aprovecha desde hace miles de años: los antiguos griegos utilizaban ruedas movidas por agua para la producción de harina de trigo. La construcción de centrales hidroeléctricas se registró desde el siglo XIX, pero fue hasta inicios del siglo XX donde, debido a la gran demanda de electricidad, se popularizaron.
Existen tres tipos principales de centrales hidroeléctricas: de embalse, de desvío y de acumulación por bombeo.
* Centrales de embalse: Es la más común de las centrales hidroeléctricas; como su nombre lo indica, utiliza una represa para almacenar agua de algún río, esto ocasiona que el flujo se detenga por un determinado tiempo y volumen para después liberarlo y que propicie el movimiento de una turbina, en otras palabras, la energía potencial del agua se transforma en energía cinética que, a su vez, se convierte en energía mecánica con el movimiento de la turbina y con ayuda del generador se convierte en electricidad.
* Centrales de desvío: Este tipo de centrales canalizan una parte del flujo de un río a través de un canal o tubería para generar el movimiento de la turbina sin necesidad de un embalse.
* Centrales de bombeo: Constan de dos embalses situados a diferente nivel, cuando la demanda de electricidad es baja, el embalse inferior bombea agua hacia el superior. Cuando la demanda es alta, el embalse superior libera el flujo del agua y se genera la energía eléctrica de manera convencional.
Fuente: Takeuchi, N (2014). Energía y medio ambiente. Manual de innovaciones tecnológicas para su mejor aprovechamiento. Universidad Nacional Autónoma de México; Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales. México.